De viajes, motores y ámbitos

Cada curso es un viaje. Sabemos el destino y en septiembre nos ponemos en marcha. Este año la dirección nos ha pedido a 20 personas que viajáramos en el mismo coche. Casi sin tiempo para preparar las maletas. Vamos, que trabajáramos por ámbitos. No cabíamos y como sabíamos a dónde queríamos llegar, cada uno empezó por lo más fácil: unos en autobús, otras en tren, alguna cogió su coche, otro en moto... 

A mitad de camino y para no perdernos decidimos ir en coche. A la vez. Al mismo ritmo y por el mismo camino. Pero seguíamos sin tener el vehículo en el que entrásemos todos y todas. Además, ¿quién conduce? ¿Diesel o gasolina? Hombre, la Comisión Europea está prohibiendo los diesel, por algo será. ¿Por interés? Ni uno, ni otro. El motor más eficiente está aún por fabricar. 

Retomemos el viaje. Estamos llegando al destino. El buen viajero sabe que el trayecto forma parte de las vacaciones. Disfrutemos del día a día de la profesión más bonita del mundo. El curso que viene volveremos a viajar juntos. Haremos el mismo camino. Sabemos dónde ponen los mejores menús, las mejores vistas... y los caminos más sinuosos. Subid, que os llevo porque si algo tengo claro es que el camino lo quiero volver a hacer con vosotras y vosotros.